Rosa E. Pacheco-Torrejon

Nuestra Querida Mamy Rosa Esther Torrejón-Verasay de Pacheco 06/29/1934 – 02/09/2021 Nuestra querida mama, Rosa Esther Torrejón-Verasay, nació en 1934 en Copiapó, Chile, Sud América. Ella era la más menor de su familia. Siempre nos decía que era la última rueda del coche. Pero pienso yo que ella era la más importante rueda del coche. Desde su niñez ella se creó con su hermana mayor, nuestra Tía Zaida. Nos decía que paso un verano como niña con su mama en las montañas adonde vivía nuestra Abuela Maria. Nos contaba que se pasaba los días cantando en las montañas como la película “Sound of Music”. Nos contaba sus traviesas como niña y sus cuentos eran tan lleno de alegría. Nuestra Mama siempre era una persona llena de alegría y llena del espíritu santo. Ella cantaba en la iglesia cuando era niña y su canción favorita era Ave María. Siempre nos decía que esa era la canción que quería que le pongan el día que Nuestro Señor la llame al cielo. Creándose con su hermana mayor, Tía Zaida, aprendió como coser y le gustaba mucho. Nos contaba que un día cuando ya era de edad le sugirieron a trabajar en un hospital. No le dijeron exactamente en que iba a trabajar solo que tenía que llevar a una cama portable con una persona debajo de la sabana. Cuando se enteró que era un cuerpo de un fallecido nunca más regreso a trabajar en el hospital. Mamy era un persona muy sencilla y bien trabajadora. Ese modo de vivir nos inculco a nosotros, sus 3 niños. Ya en sus 20 años se consiguió un trabajo como niñera con una familia Italiana que tenía una casa en Argentina. Le ofrecieron ir con ellos a vivir en Argentina y pensado lo bien, acepto la oferta. Nos contaba que cuando le anunciaron en el tren que ya se iban a salir del territorio de Chile, ahí se puso bien emocional. Cuando ya llego a Argentina y ya estaba trabajando como niñera quien hubiese dicho que su mundo iba a cambiarse por lo bueno. En 1957 en Córdoba, Argentina conoció al hombre que iba ser su compañero del alma por más de 60 años, nuestro querido padre, Don Victor Pacheco-Quispe del Perú. Era el destino que se conocieran de una manera única. Y atreves de los primeros años juntos se pasaban los fines de semanas viajando y poco a poco se iban conociendo más y más. Ya en Octubre 5 de 1958 se casaron. Y despues en 1962 empezaron su familia con el nacimiento de su primera hija, Ana María Alejandra. Después salió la oportunidad de ir a vivir en los E.E.U.U. atravez de la familia de nuestro papa. Por un corto tiempo Mamy regreso a su querida Chile con la Nena esperando que los trámites para vivir en Chicago, IL se aprobaran. Cuando ya se aprobó, Mamy y la Nena viajaron a Chicago, IL para reencontrase con nuestro padre y empezar a vivir en un país de que solo hablaban inglés. Mamy nos contaba que ella empezó a escuchar la radio y ver las telenovelas en ingles adonde poco a poco aprendía a hablar unas cuantas palabras en inglés. Mamy era una persona que encontraba la manera como hacer las cosas sin que nadie le ensenaba. Ella siempre nos decía “solo hay que encontrarle la vuelta”. Ya en 1968 crecieron su familia con el nacimiento de su único hijo, yo, Victor Hugo, y en el próximo año nació su hija menor, Marcela Zaida en Chicago, IL. Después surgió la oportunidad de ir a vivir en otros estados como California con el nuevo trabajo de nuestro padre. Yo sé que le justo mucho estas nuevas aventuras porque atreves de los años nosotros hemos vivido en 7 diferentes estados de los E.E.U.U. Mamy siempre nos inculco que debemos ser buenos hijos e hijas de nuestro Señor y Salvador Jesús Cristo. Siempre le gustaba ir a la Iglesia los domingos que podía ir. Y siempre tuvo fe en Dios que todo iba a salir bien por la gracia de Dios. Ya como mayor de edad yo siempre le preguntaba cada vez que le visitaba cómo ella estaba, a cada vez ella me decía “muy bien gracias a Dios”. Yo sé que ahorra esta con nuestro Señor por la fe que siempre tuvo ella en él y la Virgen María. Atreves de los años nació su única nieta, Janine Mariela en Fort Worth, Tejas en 1995. Mamy era tan feliz con tener una nieta y Janine se creyó con su Mama Alejandra y su Gran mama por muchos años juntas las tres generaciones. En el último cumpleaños # 53 míos, que yo pasé con Mamy este 22 de Enero de este año 2021 yo le dije a Mamy “sabes que Mamy tú has complido 7 etapas que no muchas señoras pueden lograr. Tu fuiste una Hija honorable, una Hermana querida, una Amiga única, una Tía maravillosa, una Esposa espectacular, una Madre Hermosa y una Cariñosa Gran mama. Ella me sonreía a escuchar eso. Yo sé que Dios nos dio la mejora persona que pudo cumplir con tantos dones. Y le doy gracias a Dios por los 86 años que le dio a nuestra querida Mama vivir en este mundo. Se que ya no está sufriendo más y que está descansando en paz con nuestro Señor y Salvador Jesús Cristo en el cielo. Y sé que algún día cuando diga el Señor nos veremos otra vez en el más allá. Siempre tengo muchas dulces memorias de nuestra querida Mama y siempre la llevo en mi corazón. ¡Y como Mamy siempre decía, Y que Viva Chile! ¡Viva! Una Dedicación En Cariñosa Memoria de Nuestra Mamy Dios vio que ya estabas cansada Y que una cura no iba a venir Dios te abrazo y te dijo “Ven a mi” Con ojos llenos de lágrimas te vimos desaparecer Aunque te queremos tanto no podemos hacerte quedar Un corazón de Oro ha dejado de latir Manos que han trabajado tanto ya está en descanso Dios nos rompió el corazón para probarnos que el eligió llevarse lo mejor Es triste aquí sin ti Te extrañamos más cada día La vida no es como antes Desde el día que te fuiste Cuando los días están triste y con soledad Y todo parece andar mal Nosotros podemos oírte soplarnos Alégrate y sigue Adelante Cada vez que vemos tu foto Parece que estas sonriendo y nos dices No llores más, estoy en las manos de Dios Y nos veremos algún día otra vez Amen ~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~ EULOGY FOR ROSA ESTHER TORREJÓN DE PACHECO ANNUNCIATION CATHOLIC CHURCH - LONGWOOD, FL ON JUNE 29, 2021, 1:30 PM SPANISH: El 29 de Junio de 1934 nació en Copiapó, Chile, Rosa Esther Torrejón Verasay, hija de María y Benito, hermana de Daniel, Genaro, Juan, Benito, Bertha, Adriana y Zaida. A los 18 años se trasladó a la capital de Chile, Santiago, para vivir con su hermana, la diseñadora de moda Zaida. Al aceptar el papel de niñera de una familia Italiana que se trasladaba a Argentina, dejó su querido país de Chile por primera vez en su vida. Al llegar a Córdoba, Argentina en 1957, inesperadamente por coincidencia del correo postal, conoció, se enamoró y se casó con un estudiante Peruano de Ingeniería Eléctrica llamado Víctor Manuel Pacheco Quispe, y comenzó una nueva vida creando una familia amorosa con un hijo y dos hijas, y una nieta. En 1967, Rosa y Víctor se embarcaron en una nueva vida en los Estados Unidos por el trabajo de Víctor como Ingeniero Eléctrico en Plantas Nucleares, y vivieron en 20 ciudades, sobre 7 estados, y visitaron 8 países diferentes. Su vida estuvo llena de maravillosas aventuras viajando por todo Estados Unidos y varios viajes internacionales que disfrutó mucho. Ella floreció en el papel de Hija, Hermana, Tía, Esposa, Madre y Abuela por muchos años felices. Rosa enseñó a sus hijos los valores del amor, la buena vida, la salud, la creatividad, la religión y la felicidad. Le encantaba coser ropa y hacer manualidades decorativas, cocinar deliciosas recetas que ella misma elaboraba, hacer coloridos dibujos, viajar y conocer nuevas ciudades, celebrar cumpleaños y fiestas con su marido e hijos y contarles su vida cotidiana escribiendo cartas a su familia en Chile. A Rosa le encantaban los pájaritos, las mariposas, las flores bonitas, la misa católica, comprar artículos de época, los cupones, charlar tomando el té, ver novelas, bailar y escuchar música, leer sus periódicos y revistas y añadir la fecha con descripción a las fotos de sus álbumes. Rosita amaba su herencia Chilena, disfrutando de todo lo Chileno, desde la hermosa bandera, las famosas cuecas, dichos Chilenos, las empanadas deliciosas que hacía a mano, deliciosa comida con mariscos Chilenos, y disfrutando de las hermosas artesanías, especialmente con la puntada rococó. Rosa siempre tenía palabras amables para decir, tenía una hermosa risa, daba maravillosos consejos amorosos, era cariñosa y considerada, era paciente y comprensiva, siempre tenía un oído atento, tenía una maravillosa memoria, te abrazaba con un cálido abrazo y te miraba con sus ojos que brillaban con una hermosa sonrisa. Ella siempre decía que la cocina era el corazón de la casa, pero Mamy era el verdadero corazón de nuestra familia. Rosa vivió una vida maravillosa y plena, llena de amor, felicidad y sonrisas. Fue increíblemente amada y apreciada por su familia y será muy extrañada por todos los que tuvieron la suerte de conocerla. Nuestro mundo se siente vacío sin su hermosa sonrisa y sus ojos brillantes, pero ella vive como nuestro ángel guardián especial en el cielo, en nuestros corazones y recuerdos para siempre. La estábamos abrazando con nuestras manos, brazos y besos cuando Dios decidió llevársela al cielo, nuestras palabras de amor para ella fueron lo último que escuchó y tuvimos la bendición de estar con ella hasta el momento final. Hoy en el día de la celebración de su vida, le rogamos y pedimos a Dios, al Señor de los Milagros, a Jesucristo, a la Virgen María, a la Virgen de la Candelaria de Chile, a Santa Teresita de los Andes, a la Virgen de Guadalupe, a San Martín de Porres del Perú, a Santa Rosa de Lima del Perú y a todos los ángeles y santos que bendigan su espíritu y le concedan la paz eterna. Q.E.P.D Rosa Esther Torrejón de Pacheco, te queremos con todo nuestro amor. ENGLISH: On June 29, 1934, Rosa Esther Torrejón Verasay was born in Copiapó, Chile, daughter of María and Benito, sister of Daniel, Genaro, Juan, Benito, Bertha, Adriana and Zaida. At the age of 18, she moved to the capital of Chile, Santiago, to live with her sister, fashion designer Zaida. Accepting the role of nanny for an Italian family moving to Argentina, she left her beloved country of Chile for the first time in her life. Arriving in Cordoba, Argentina in 1957, via unexpected coincidence of postal mail mix-up, she met, fell in love and married a Peruvian Electrical Engineering student named Victor Manuel Pacheco Quispe and began a new life creating a loving family with a son and two daughters, and a grandchild. In 1967, Rosa and Victor embarked on their new life in the United States for Victor's job as an Electrical Engineer in Nuclear Power Plants, and lived in 20 cities, across 7 states, and visited 8 different countries. Her life was filled with wonderful adventures traveling all over the U.S. and several international trips that she enjoyed very much. She flourished in the roles of Daughter, Sister, Aunt, Wife, Mother and Grandmother for many happy years. Rosa taught her children the values of love, living a good life, health, creativity, religion and happiness. She loved sewing clothes and making decorative crafts, cooking delicious recipes that she made herself, drawing colorful pictures, traveling and exploring new cities, celebrating birthdays and holidays with her husband and children and writing letters to her family in Chile telling them about her daily life. Rosa loved birds, butterflies, beautiful flowers, the Catholic mass, shopping for vintage items, couponing, chatting over tea, watching novelas, dancing and listening to music, reading her newspapers and magazines and adding the date and description to the photos in her albums. Rosa loved her Chilean heritage, enjoying everything from Chile, from the beautiful flag, the famous cuecas dances, traditional Chilean sayings, the delicious empanadas she made by hand, preparing delectable foods using Chilean seafood, and enjoying the beautiful artisan handicrafts, especially with the rococo stitch. Rosa always had kind words to say, had a beautiful laugh, gave wonderful loving advice, was affectionate and considerate, was patient and understanding, always had an attentive ear, had a wonderful memory, embraced you with a warm hug and looked at you with her eyes that shone brilliantly with a beautiful smile. She always said that the kitchen was the heart of the house, but Mamy was the true heart of our family. Rosa lived a wonderful and full life, full of love, happiness and smiles. She was incredibly loved and cherished by her family and will be greatly missed by all who were lucky enough to know her. Our world feels empty without her beautiful smile and bright eyes, but she lives on as our special guardian angel in heaven, within our hearts and memories forever. We were embracing her with our hands, arms and kisses when God decided to take her to heaven, our words of love for her were the last thing she heard and we were blessed to be with her until the final moments. Today on this day of celebrating her life, we pray and ask God, the Lord of Miracles, Jesus Christ, the Virgin Mary, the Virgin of Candelaria of Chile, Saint Teresa of the Andes, the Virgin of Guadalupe, Saint Martin de Porres of Peru, Saint Rosa of Lima, Peru and all the angels and saints to bless her spirit and grant her eternal peace. May you rest in peace Rosa Esther Torrejón de Pacheco, we love you with all our hearts.

Rosa E. Pacheco-Torrejon

June 29, 1934 - February 9, 2021